Muchas veces tenemos ideas confusas sobre algunas profesiones. Es el caso del interiorista, bien por tener la equivocada creencia de que solo acuden a este personas adineradas, o porque se trabaja de la mano de otras profesiones en cuya intervención se tiende a entrelazar funciones de manera errónea. De ahí a que cuando nos preguntamos ¿qué hace un interiorista?, suele costarnos describir con certeza el trabajo de desempeña dicho profesional. Un interiorista es la persona formada y capacitada para la realización de reformas integrales, de proyectos de interiorismo o decoración, montaje de escenas, arquitectura efímera, visual merchandising, entre otras muchas funciones. Así pues, los lugares sobre los que trabajará un interiorista son muy diversos. Los servicios más comunes se encuadran en locales comerciales, viviendas, tanto nuevas como de segunda mano, hoteles, restaurantes, congresos o salas de exposiciones, y muchos otros eventos. En todos y cada uno de ellos, el interiorista se encargará de la modificación y distribución óptima del espacio para sacar el mayor partido posible tanto a nivel arquitectónico como ornamental. Seguirá una serie de parámetros y, sin dejar nada al azar, detallará todo el proceso mediante plantas y alzados de distribución, planimetría con las instalaciones, así como vistas 3D con los distintos acabados, para que el cliente pueda apreciar el resultado final sin, ni siquiera, haber empezado la reforma. El profesional interiorista se ayudará de otros profesionales que tiene a su disposición para tareas que pueden incluir puede incluir la demolición de tabiques, cambios de carpintería, renovación de instalación de electricidad y fontanería, cambio de pavimentos, etc. Y el asesoramiento de profesionales de decoración. Cabe señalar la enorme importancia de esta figura a la hora de comenzar un nuevo proyecto o de dar un giro a la imagen de tu negocio, de tu hogar o de una marca con la necesidad de crear una mirada y ambiente confortable y atrayente para el público. En la actualidad es vital conseguir una primera visual que conecte con el consumidor para que este abra camino y se deje guiar por todo lo que el espacio y el servicio le puede ofrecer. Y para ello es fundamental contar con el asesoramiento y la capacitación de un profesional que consiga crear magia con un espacio en el que antes solo había vigas y cemento. Así es que cuando volváis a escuchar o hacer la pregunta ¿qué hace un interiorista? La respuesta se resume en: crear o cambiar un espacio muerto para dar vida a todo lo que en él se aprecia.